El asunto no carece de importancia institucional y política, precisamente. El interés ciudadano se ha despertado en el mismo momento en que se tuvo la certeza de que los senadores designados no pertenecen a la primera minoría (no fueron electos como tales) sino que integran -o integraban, hasta el pasado día 20 de abril de 2022- el grupo parlamentario más numeroso en el Senado de la Nación, grupo al que, como lo dispone el artículo 2.3 de la ley nacional 24.397, le corresponde nominar solo a dos de los cuatro senadores. No a tres.
Es contradictorio sostener posiciones federalistas defensivas, reclamando ‘más atención’ por parte de Buenos Aires, y, al mismo tiempo, hacer depender las elecciones provinciales de los movimientos políticos que giran alrededor del centralismo porteño.
La Constitución de Salta establece que los jueces de la Corte de Justicia duran seis años en sus funciones, a diferencia de los demás jueces provinciales, que son inamovibles en sus cargos «mientras duren su buena conducta y desempeño», según reza el artículo 156, primero y segundo párrafo.
Existe entre nosotros un consenso bastante amplio en torno a que los jueces de la Corte de Justicia de Salta, que por imperio de la Constitución desempeñan sus cargos por un periodo de tiempo limitado, son inamovibles mientras ejerzan su cargo.
Pido disculpas a los lectores por comenzar estas reflexiones con un viejo recuerdo familiar que ha resistido no solo el paso del tiempo sino también algunas vicisitudes que, en este caso, conviene no recordar.
Quienes pretenden reformar la Constitución para reforzar sus posiciones de poder y reverdecer las glorias amarillentas del pasado, saben que solo pueden alcanzar su propósito sembrando confusión y distorsionando los debates. Son conscientes de que si el protagonismo es asumido por una ciudadanía activa e informada y se promueven debates serios y bien fundamentados, sus posibilidades de sacar partido de la reforma son mínimas, por no decir casi nulas.
Juan Carlos Romero y Juan Manuel Urtubey, por ese orden, han venido repartiéndose el poder político de Salta, y lo han incrementado a voluntad, de espaldas a los ciudadanos y sus necesidades, desde hace más de dos décadas.
El fracaso de la escuela pública en Salta no se aprecia tanto en las pruebas globales a las que con frecuencia se somete a nuestros estudiantes para evaluar su conocimiento sino en la menguada calidad de nuestra democracia, en la pobreza de nuestros debates y en la chatura generalizada de nuestra política.
Como ya todos sabemos, la reciente sentencia de la Corte Suprema de Justicia sobre la enseñanza religiosa en Salta decidió que el párrafo del artículo 49 de la Constitución provincial de Salta, que se refiere al derecho de los padres a que sus hijos reciban en la escuela pública la educación religiosa que esté de acuerdo con sus propias convicciones, no vulnera la Constitución Nacional.
El decimocuarto álbum que Billy Joel (Bronx, NY, 9/5/1949) grabó para la Columbia Records se puso en venta en España a comienzos del otoño de 1989. Unas pocas semanas antes, el 9 de septiembre, se produjo mi segundo arribo a Europa. A diferencia de la primera vez, en este segundo viaje me acompañaban mi primera mujer y mi hijo mayor, que aún no había cumplido dos años. Llegábamos dispuestos a iniciar una nueva etapa de nuestras vidas, lejos de la Argentina y confiados en encontrar en nuestro nuevo destino la tranquilidad que habíamos perdido.